Yolanda Moratilla, primera mujer que ingresa en la Sección de Ingeniería de la RADE

Por su perspectiva multidisciplinar y transversal del conocimiento, la RADE “es el equivalente español de la Academia Sueca”, según la nueva académica

Yolanda Moratilla, primera mujer que ingresa en la Sección de Ingeniería de la RADE

MADRID (29-10-2015).- Al tomar posesión de la medalla número 118 de la Real Academia de Doctores de España (RADE), Yolanda Moratilla Soria, directora de la Cátedra Rafael Mariño de Nuevas Tecnologías Energéticas, de la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE, y presidenta del Comité de Energía y Recursos Naturales, del Instituto de la Ingeniería de España, se ha convertido en la primera mujer miembro de la Sección de Ingeniería de esta corporación.

Presidió la sesión de ingreso de la nueva académica el presidente de la RADE, doctor Jesús Álvarez Fernández-Represa, acompañado del rector de la universidad de la recipiendaria, doctor Julio L. Martínez, SJ, y de otros miembros de la junta directiva de la entidad.

Al iniciar su discurso de ingreso, la doctora Moratilla resaltó el honor que significa pertenecer a esta real academia, “única que exige tener el máximo grado académico para poder pertenecer a ella, y que con su específica peculiaridad de la perspectiva multidisciplinar y transversal del conocimiento es el equivalente español de la Academia Sueca”; y subrayó que esta institución “debe ser principal órgano asesor del Estado en todo aquello en que se precise un alto grado de conocimiento y estar al margen de compromisos e intereses políticos”.

En su intervención, la doctora Moratilla trazó un viaje por el mundo de la energía, que inició en la termodinámica y culminó en la ingeniería energética, y repasó el estado de los diversos recursos energéticos y sus tecnologías, para analizar con detenimiento sus ventajas e inconvenientes desde todas las perspectivas. Al referirse al mix eléctrico y la política energética, afirmó que, “ninguna tecnología puede, por sí sola, cubrir la generación eléctrica de un país. La solución ha de venir por una combinación de varias de ellas, de forma que cada una contribuya dentro de sus posibilidades tanto potenciales como técnicas, económicas y medioambientales”.

La RADE, asesora del Estado

Precisó Moratilla que, aunque todas las decisiones energéticas han de tomarse con criterios técnicos y responsabilidad política, “no debe olvidarse que en una sociedad democrática no se han de imponer las medidas, aunque sean correctas. En este sentido, es necesaria una mejor educación en temas energéticos, que acompañe a las futuras generaciones en todas las etapas de su formación”. “Esa es una responsabilidad de la que el mundo académico no puede desentenderse y en la que creo que esta Real Academia de Doctores de España, como depositaria de todos los saberes, ha de jugar un papel fundamental, asesorando a las más altas instancias del Estado en planes de estudio y cualquier otro tipo de iniciativas que permitan que la sociedad futura sea más madura y esté mejor informada a la hora de tomar decisiones”.

“Nos encontramos —dijo en el capítulo de conclusiones— en una encrucijada histórica en la que confluyen las restricciones medioambientales relativas al cambio climático, nuevas tecnologías que permiten aprovechar mejor los recursos naturales, demandas crecientes, aunque mitigadas por los años de crisis, y acceso desigual a la energía por parte de la población mundial. Ante esta situación es preciso mantener la mente abierta a las nuevas posibilidades que ofrecen las tecnologías energéticas, puesto que el ingenio humano siempre ha sabido encontrar soluciones ante las crisis energéticas: la máquina de vapor, la energía nuclear, la diversificación de las energías renovables,… Evidentemente, esto no significa que debamos mantener una despreocupación irresponsable al problema energético. Mientras que los científicos e ingenieros hacen viables las nuevas tecnologías, la sociedad debe modificar sus hábitos de consumo, no para volver a las cuevas, sino para utilizar los recursos de una manera responsable y eficiente, compatibilizando el desarrollo económico con la herencia a las futuras generaciones”.

Temas de reflexión

En su discurso de respuesta, el doctor Luis Alberto Petit Herrera, miembro también de la Sección de Ingeniería, destacó que la recién ingresada “pertenece a ese grupo selecto de ingenieros que antes de cumplir con su vocación docente e investigadora en el campo de la energía y los recursos naturales, abandonó las aulas para palpar lo que es nuestra vida cuando ejercemos nuestra labor en una empresa, en este caso de ingeniera, donde intervino en 18 proyectos en relación con la industria petroquímica y la metalurgia”.

Tras manifestar que asume el contenido del discurso de la recipiendaria, el doctor Petit Herrera le propuso que siga ahondando sobre varios puntos de reflexión, entre los que figuran: la insolidaridad que supone que casi la mitad de los 7 000 millones de habitantes del planeta no tienen acceso a ninguna fuente de energía, incluida la electricidad; la necesidad de un consumo energético responsable para salvaguardar el imprescindible medio ambiente; el papel de los ingenieros para innovar en productos, materiales, procesos o cadenas de valor, recurriendo a energías limpias, o la ya iniciada catástrofe que es consecuencia del cambio climático inducido, en gran parte, por la actividad humana que llevará a la destrucción de los ecosistemas.