La Biblioteca Complutense, único socio europeo de HathiTrust, uno de los mejores repositorios científicos

En los últimos seis meses, la red internacional recibió un millón de visitas a través de la web del sistema bibliotecario de la universidad madrileña

La Biblioteca Complutense, único socio europeo de HathiTrust, uno de los mejores repositorios científicos

A través de la web de la Biblioteca de la Universidad Complutense, única institución europea que pertenece a esta red, en los últimos seis meses ha recibido un millón de visitas el repositorio digital HathiTrust Digital Library, que agrupa más de cien universidades y entidades científicas internacionales, como Harvard, el Instituto Tecnológico de Massachusetts o la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos, la mayor del mundo, según Manuela Palafox Parejo, directora de la Biblioteca Complutense que, junto a la directora de la Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla, Marta Torres Santo Domingo, intervino en la sesión “El patrimonio bibliográfico de la Biblioteca Complutense en el siglo XXI”, que inauguró las actividades de la Real Academia de Doctores de España (RADE) tras el paréntesis estival.

El presidente de la RADE, Jesús Álvarez Fernández-Represa, presentó a las dos ponentes y les dio las gracias por la permanente y valiosa colaboración que han prestado a la corporación académica, en todo momento, para desarrollar sus actividades.

Abrió el turno de intervenciones Marta Torres Santo Domingo, para explicar que la Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla, tiene la misión de custodiar y conservar el patrimonio bibliográfico de dicha universidad albergado en su sede.

Esta biblioteca, subrayó la doctora Torres Santo Domingo, “no es un depósito de tesoros dormidos, ni un museo de joyas escondidas, ni un cementerio de libros olvidados”. Por el contrario, “es un centro vivo del pensamiento, de diálogo con el pasado y de creación de conocimiento con sus profesores e investigadores para el futuro”. Con palabras de Umberto Eco, añadió que “los bibliotecarios no somos los guardianes de los libros, sino guardianes contra las fuerzas del olvido, que es el auténtico enemigo de la verdad. Los libros son objetos históricos, valiosos no solo por su condición de obra de arte, por sus rareza o antigüedad, sino que han pasado a ser objetos culturales, testimonios para la historia”.

La Marqués de Valdecilla contiene un conjunto de colecciones bibliográficas compuesto por 284.000 libros y documentos, de los que 160.081 son obras manuscritas e impresas: 148 códices (latinos, como De Laudibus crucis, de Rabano Mauro, del siglo IX, y castellanos), 6.000 manuscritos (21 hebreos, siete griegos, nueve árabes), 741 incunables (la cuarta colección de este tipo de edición de España), y 150.000 impresos de los siglos XVI al XIX. Un 10 por ciento son ejemplares únicos en España, y bastantes lo son en el mundo. Las materias científico-técnicas que abarcan pertenecen a todas las ramas del saber.

La mayoría de las bibliotecas históricas españolas, apuntó Torres Santo Domingo, se han basado en fondos procedentes de la Desamortización, mientras que a la Complutense no llegó nada con ese origen. La herencia más antigua de la Marqués de Valdecilla proviene de la biblioteca renacentista del cardenal Cisneros en la Universidad de Alcalá, de los siglos XV y XVI. La segunda gran columna de la colección son los fondos del Colegio Imperial de los jesuitas, del XVII. La tercera procedencia es de la Universidad de Madrid, creada en el XIX en el que había sido noviciado jesuita, en el mismo caserón de la calle de San Bernardo que es actual sede de la biblioteca; y el cuarto, los ejemplares recuperados de los escombros de la Facultad de Filosofía y Letras, en la Ciudad Universitaria madrileña, que fue frente de batalla durante la Guerra Civil de 1936. A este centro se habían llevado la colección del Colegio Imperial de los jesuitas y los libros más importantes, manuscritos e incunables, de Alcalá. Muchas de aquellas obras se perdieron durante los combates entablados dentro de la facultad, en los que los contendientes utilizaron los libros como parapeto, como dijo, durante el coloquio, la doctora Torres Santo Domingo. La consecuencia fue un buen número de volúmenes con balas alojadas en su interior, quemados o destruidos.

La Marqués de Valdecilla tiene el orgullo, afirmó su directora, de conservar colecciones y archivos de grandes personalidades, como Isabel la Católica, la condesa de Campo Alange o Rubén Darío; de prestigiosos profesores de la Complutense, como Fernando de Castro, José Simón Díaz, Francisco Guerra, Ángel Vián, Lafuente Ferrari, Hernández Pacheco, y de organizaciones sin las que no se puede conocer la historia de España, como el archivo del PCE.

Cerró su intervención, Torres Santo Domingo, detallando los objetivos estratégicos de la biblioteca histórica: preservar y conservar sus fondos, describirlos y catalogarlos, digitalizarlos, hacerlos accesibles y difundirlos, apoyar la docencia y la investigación, colaborar con la sociedad e internacionalizar sus relaciones.

La mayor biblioteca universitaria española

Con sus tres millones de ejemplares: la colección impresa de los siglos XX y XXI, más de 130.000 monografías electrónicas y 140.000 libros digitalizados, 50.000 títulos de publicaciones periódicas impresas y 40.000 revistas electrónicas, 400 bases de datos, 25.000 documentos en el archivo E-Prints Complutense, que incluye documentos  producto de la investigación, y 500 años de historia, la Biblioteca de la Universidad Complutense es el mayor sistema bibliotecario universitario de España, constituido por 26 bibliotecas situadas en sus centros académicos, la Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla, la dirección y los servicios centrales, según su directora, Manuela Palafox Parejo.

Para llevar a cabo su misión de preservar y hacer visible sus colecciones, la Biblioteca de la Complutense viene trabajando desde tiempo atrás en reforzar su relación y colaboración con todo tipo de entidades, públicas y privadas, nacionales e internacionales, que actúan en el ámbito de su competencia, como el Ministerio de Cultura, la Comunidad de Madrid, Google, la Fundación Santander, otras universidades, la Fundación de Ciencias de la Salud, Editorial Extramuros, Proquest, E-Libro, Madroño, HathiTrust Digital Library y el proyecto Europeana.

En  septiembre  de  2006, la Complutense firmó un acuerdo con Google para la digitalización masiva de los libros que están en el dominio público. Fue la sexta universidad del mundo que se sumó al proyecto y la segunda de Europa. En 2011 se habían digitalizado ya más de 100.000 libros.

Conscientes de que “la preservación digital solo podría alcanzarse como resultado de una implicación cooperativa de instituciones académicas, siguiendo los estándares de la comunidad bibliotecaria internacional”, como manifestó la doctora Palafox Parejo, y dado que en España y en Europa no había ninguna colaboración en estos términos, decidieron localizar las copias digitales de sus colecciones, que les había facilitado Google, en el repositorio HathiTrust Digital Library, donde se integraron en noviembre de 2010.           

“Tenemos 75.000 libros actualmente en esta biblioteca, a cuyos textos completos se puede acceder”, agregó Palafox Parejo. El principal objetivo de HathiTrust, que se fundó en 2008, es contribuir al bien común recopilando, organizando, preservando, comunicando y compartiendo el conocimiento. Actualmente alberga 13 millones de volúmenes, de los cuales 5.000.000 están en el dominio público.

Las ventajas de pertenecer a esta red son múltiples. Entre las que destacó la directora, figuran: servicios de almacenamiento de contenidos digitales que sería muy difícil de alcanzar en los servidores informáticos de la Complutense, un almacenamiento de alta calidad eficiente y persistente en el tiempo, y la garantía de que se migrarán los formatos cuando desaparezcan los que se usan actualmente. Al sistema de HathiTrust se accede desde la web de la Biblioteca Complutense.

Además de otros consorcios bibliotecarios, la Complutense participa también, junto a otras 18 bibliotecas universitarias y de investigación, en Europeana Libraries y European Library, un proyecto de dos años financiado por el Programa ICT-PSP de la Comisión Europea, que incorpora más de cinco millones de objetos digitales, y cuenta con el respaldo de las principales asociaciones internacionales de bibliotecas: CENL (Conference of European National Librarians), CERL (Consortium of European Research Libraries), LIBER (Ligue des Bibliothèques Européennes de Recherche).

El objetivo de esta agrupación es reunir el contenido digital de las principales bibliotecas de investigación de 14 países europeos, construir sistemas de larga duración capaces de almacenar e indizar grandes volúmenes de contenido digitalizado, posibilitar la indización y búsqueda de textos completos y promocionar las valiosas colecciones y bibliotecas europeas.

Palafox Parejo expresó su satisfacción por haber creado una colección digital de más de 120.000 volúmenes del patrimonio bibliográfico, que mejora la preservación de las obras impresas y, al mismo tiempo, estar integrados en HathiTrust, uno de los proyectos de preservación más importantes e innovadores para la comunidad universitaria. “De la misma manera ⎯añadió⎯, nuestra participación en el proyecto europeo Europeana Libraries y The European Library ha incrementado la difusión de nuestro patrimonio digital, y estamos integrados en un área de investigación realacionada con la web semántica y los datos enlazados”.

“La creación de las colecciones digitales ha fortalecido las relaciones entre la Biblioteca de la Complutense y sus investigadores, como queda reflejado en algunos proyectos en el campo de las humanidades digitales”, concluyó.